Como en San Miguel del Monte, una persecución policial terminó en muerte. Diego Cagliero tenía 30 años y falleció tras recibir varios disparos en medio de un operativo en Tres de Febrero
Familiares, amigos y allegados de Diego Cagliero marcharon para pedir por el esclarecimiento de su asesinato que se produjo en medio de un operativo policial en el partido bonaerense de Tres de Febrero. En la marcha, que se realizó desde la plaza de Martín Coronado hasta la comisaria donde prestan servicio los efectivos que participaron del homicidio, denunciaron el accionar policial y pidieron que se investigue como un caso de gatillo fácil.
El caso se conoce en plena conmoción por los cuatro muertos en San Miguel del Monte, donde se comprobó que los agentes dispararon en una persecución de la que todavía se desconocen las causas.
De acuerdo a las primeras informaciones, el domingo pasado la policía realizó un operativo cerrojo para dar con un grupo de chicos que presuntamente había asaltado en un supermercado. Mientras circulaban por la avenida Márquez, justo frente a la comisaría Eufrasio Alvarez, varios patrulleros los encerraron y, sin dar la voz de alto, comienzan a disparar. Así, asesinaron a Cagliero y dejaron a otro joven herido de gravedad.
Ese mismo día, previo al fatal desenlace, el joven y sus amigos habían ido al entierro de otro conocido y luego compraron en la sucursal de un conocido supermercado. En el lugar se habría producido una discusión con los guardias de seguridad, que luego llamaron a la policía y denunciaron un hurto. Los familiares niegan que hayan robado y aseguran que ninguno de los jóvenes tiene antecedentes penales.
Según dijo un defensor oficial a familiares de Cagliero, en las imágenes registradas por la cámara de seguridad del local no se observa a ninguno de los jóvenes exhibiendo arma alguna.
“Mi hijo fue al velatorio de un amigo, y cuando salieron fueron al supermercado con otros amigos en una camioneta de AySA. Pero se dieron cuenta que no les alcanzaba para comprar todo lo que querían llevar, y dejaron lo que no pudieron pagar. El sereno del lugar llamó al 911 y avisó de un robo. Cuando salieron se encontraron con un montón de policías. Bajaron de la camioneta, pero la policía les disparó y mi hijo murió”, contó Adriana García, madre de Diego, en diálogo con TN.