La casa donde funcionó un centro clandestino de detención durante la dictadura, en Morón, se incendió. El fuego destruyó parte del inmueble y se perdieron materiales de trabajo.
El hecho ocurrió en un chalet donde los militares instalaron la Regional de Inteligencia de la Fuerza Aérea (RIBA) y habría sucedido por obra de un ladrón que robaba en los techos del lugar y las casas vecinas.
La RIBA ocupaba dos casas que fueron unidas por los aviadores para instalar el centro, en la esquina de Entre Ríos y San Martín. En al altillo aun se preservaban máquinas, también diarios y revistas de la época.
Por los crímenes de la RIBA debió responder, entre otros, Omar Graffigna, jefe de la Fuerza Aérea entre 1979 y 1981. En 2016 fue condenado a 25 años de cárcel por las desapariciones de José Manuel Pérez Rojo y Patricia Roisinblit, hija de Rosa, referente de Abuelas de de Plaza de Mayo. Ambos pasaron por la RIBA y Patricia, embarazada de ocho meses al momento de su secuestro, dio a luz en la ESMA. Su hijo Guillermo recuperó su identidad a los 22 años, en 2000.
En 2017, el inmueble fue declarado Sitio Histórico de la Memoria.